
Los trabajadores españoles tendrán que fichar a la entrada y salida de sus empresas a partir de mayo, aunque parte de ellos ya lo venían haciendo a través de distintos mecanismos, además del control tradicional que se sigue en la Administración Pública. Es el resultado de la aplicación del nuevo «registro diario de jornada» que el Gobierno ha aprobado, dentro de un nuevo decreto que sirve como ‘cajón de sastre’ para incluir distintos tipos de medidas sociolaborales, desde subsidios a parados maduros y bonificaciones a su contratación hasta ayudas a hogares en situación de pobreza e incluso matices en el programa laboral de garantía juvenil.
Todos los trabajadores tendrán que fichar al entrar y salir de la empresa. El Gobierno presenta a los sindicatos una reforma del Estatuto de los Trabajadores.